Diputado Carmona intervino en la sesión de la Cámara
Por 80 votos a favor, 15 en contra y 2 abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputados aprobó el convenio internacional que otorga a los miembros de dicho tribunal las inmunidades para actuar en nuestro país. De este modo, este convenio establece que la Corte tendrá personalidad jurídica internacional, privilegios e inmunidades que sean necesarios para el cumplimiento de sus propósitos. Precisa que los locales de la Corte en los Estados Partes serán inviolables y tendrán derecho a enarbolar su pabellón, además de poder exhibir su emblema y sus señales en sus vehículos u otros medios de transporte que utilice.
Al respecto del Diputado Lautaro Carmona, intervino en el debate en la Cámara diciendo, “este debate que creo debe sorprender a la tribuna joven cuando se busca relativizar los derechos humanos por un sector de este hemiciclo. Hay aquí un tema en un país que vivió una dictadura, en un país que se demoró 10 años en ratificar su adhesión al Tribunal Penal Internacional. Tribunal como bien se ha dicho no tiene viabilidad y eficacia sino cuenta con las inmunidades obvias que un organismo de este carácter debe tener para poder operar sólo en función de hacer velar el respeto irrestricto a los derechos humanos vinculados a crímenes de guerra, a delitos de lesa humanidad y a genocidios”.
En el debate ocurrido en la Cámara, el Diputado Carmona enfatizó “no se puede aprobar parcialmente un Tratado de este tipo, no puede adscribirse a un tribunal de esta dimensión un país desde una perspectiva y otro desde otra”. “No se entiende una mentalidad que está de acuerdo en abrirse al mundo siempre y cuando a la hora de normas de esta dimensión no operen sobre las conductas dentro de nuestro país”, aseguró Carmona.
LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS NO SE RELATIVIZA
“Creo que no se puede hacer un debate respecto a participar de este Tribunal, habiendo vivido lo que hemos vivido en la cantidad de años que ha durado el terrorismo en Chile, si no se toma nota que el actual Gobierno, el Presidente de la República nos dijo en su mensaje que sin relativización, sin ningún tipo de restricción impulsaría el respeto irrestricto a los derechos humanos. Reivindicó incluso la idea de que en su Gobierno no habría funcionarios vinculados al atropello de los derechos humanos. Tuvo que tomar medidas cuando un ex embajador en Argentina, se atrevió a reivindicar las bondades de un golpe de Estado en un lugar como Buenos Aires, que además también vivió el horror y el terror de la operación Cóndor que costó tantas vidas a nuestra gente, a los latinoamericanos. Desde esa perspectiva no aprobar lo que está en el debate de hoy significa efectivamente distanciarse y renunciar a la adhesión que se hizo tiempo atrás al Tribunal Penal Internacional. Un Tribunal como éste si hubiera existido el año 73’, el dictador Augusto Pinochet habría tenido que dar cuenta a un Tribunal en la Haya. Un tribunal como éste si hubiese existido años atrás la historia que hoy día conocemos o conoce masivamente el país, a propósito del Mundial de Fútbol en Sudáfrica y que ha reivindicado la figura de Nelson Mandela, hubiera tenido otro destino”, aseguró.
“Cuando se trata de defender los derechos humanos no hay exageraciones. Cuando se trata de convivir con normas de civilización y que están vinculadas a las personas, a la existencia de los seres humanos, no pueden haber restricciones o relativizaciones”, agregó el parlamentario comunista, solicitando al concluir su intervención la aprobación de este Convenio Internacional
Al respecto del Diputado Lautaro Carmona, intervino en el debate en la Cámara diciendo, “este debate que creo debe sorprender a la tribuna joven cuando se busca relativizar los derechos humanos por un sector de este hemiciclo. Hay aquí un tema en un país que vivió una dictadura, en un país que se demoró 10 años en ratificar su adhesión al Tribunal Penal Internacional. Tribunal como bien se ha dicho no tiene viabilidad y eficacia sino cuenta con las inmunidades obvias que un organismo de este carácter debe tener para poder operar sólo en función de hacer velar el respeto irrestricto a los derechos humanos vinculados a crímenes de guerra, a delitos de lesa humanidad y a genocidios”.
En el debate ocurrido en la Cámara, el Diputado Carmona enfatizó “no se puede aprobar parcialmente un Tratado de este tipo, no puede adscribirse a un tribunal de esta dimensión un país desde una perspectiva y otro desde otra”. “No se entiende una mentalidad que está de acuerdo en abrirse al mundo siempre y cuando a la hora de normas de esta dimensión no operen sobre las conductas dentro de nuestro país”, aseguró Carmona.
LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS NO SE RELATIVIZA
“Creo que no se puede hacer un debate respecto a participar de este Tribunal, habiendo vivido lo que hemos vivido en la cantidad de años que ha durado el terrorismo en Chile, si no se toma nota que el actual Gobierno, el Presidente de la República nos dijo en su mensaje que sin relativización, sin ningún tipo de restricción impulsaría el respeto irrestricto a los derechos humanos. Reivindicó incluso la idea de que en su Gobierno no habría funcionarios vinculados al atropello de los derechos humanos. Tuvo que tomar medidas cuando un ex embajador en Argentina, se atrevió a reivindicar las bondades de un golpe de Estado en un lugar como Buenos Aires, que además también vivió el horror y el terror de la operación Cóndor que costó tantas vidas a nuestra gente, a los latinoamericanos. Desde esa perspectiva no aprobar lo que está en el debate de hoy significa efectivamente distanciarse y renunciar a la adhesión que se hizo tiempo atrás al Tribunal Penal Internacional. Un Tribunal como éste si hubiera existido el año 73’, el dictador Augusto Pinochet habría tenido que dar cuenta a un Tribunal en la Haya. Un tribunal como éste si hubiese existido años atrás la historia que hoy día conocemos o conoce masivamente el país, a propósito del Mundial de Fútbol en Sudáfrica y que ha reivindicado la figura de Nelson Mandela, hubiera tenido otro destino”, aseguró.
“Cuando se trata de defender los derechos humanos no hay exageraciones. Cuando se trata de convivir con normas de civilización y que están vinculadas a las personas, a la existencia de los seres humanos, no pueden haber restricciones o relativizaciones”, agregó el parlamentario comunista, solicitando al concluir su intervención la aprobación de este Convenio Internacional
Paz Tobar, Periodista
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